El Paso, Texas.- Por fin, el Presidente Joe Biden pisó un pedazo de la frontera Estados Unidos-México, pero su paso fue fugaz y curiosamente los cientos y hasta miles de migrantes que cruzan a diario se esfumaron; los vio, pero en la vecina Ciudad Juárez.
Biden fue recibido por el Gobernador texano, Greg Abbott quien no perdió tiempo para extenderle una carta convertida en un gigantesco reproche por -según él- facilitar la entrada de extranjeros irregulares por la mayor parte de la frontera sur. Biden guardo la carta en su saco y después frente a reporteros solo dijo: “aún no la leo”. Abbott acusaba que Biden evitaba los lugares con migración masiva y aunque El Paso lo era, este domingo los migrantes curiosamente desaparecieron.
Biden escoltado por dos agentes de la Patrulla Fronteriza recorrió un pedacito de ciudad y tuvo a centímetros de la muralla de acero que el gobierno trompista erigió buscando frenar la entrada de inmigrantes que para el año fiscal 2022, ya con Biden en la presidencia, sumaron casi los tres millones.
El Presidente observó de primera mano cómo los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza revisan los vehículos que vienen de México en el Puente Las Américas que conecta con Ciudad Juárez, donde les hizo algunas preguntas.
Biden tras una breve estancia en El Paso, viajó a la ciudad e México donde se reunirá mañana con su homólogo mexicano y canadiense en La Cumbre de América del Norte que por décima vez reúne a los tres mandatarios. El Presidente Joe Biden camina a un lado del muro fronterizo junto a agentes de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas.