Washington, D.C.- Mientras el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, asegura que el acuerdo bipartidista alcanzado hoy “es duro, justo y toma medidas significativas para abordar los desafíos que enfrenta nuestro país después de décadas de inacción del Congreso “organizaciones pro inmigrantes y de derechos humanos condenaron la medida y la consideraron “injusta e inhumana.

Mayorkas asegura que este permitiría al DHS expulsar más rápidamente a quienes no establecen una base legal para permanecer en Estados Unidos, reduciendo el tiempo de años a meses. Aceleraría la protección y la autorización de trabajo para aquellos con reclamos legítimos. Brindaría flexibilidad para responder a la dinámica cambiante en la frontera, incluida la prohibición temporal de las entradas fronterizas para ciertas personas cuando los encuentros son extremadamente altos.

También proporciona recursos muy necesarios para apoyar y ampliar la fuerza laboral del DHS después de décadas de falta de financiación crónica, y además invierte en tecnología para ayudar a evitar que el fentanilo ingrese a nuestro país por los puertos de entrada.

“Este acuerdo se basa en el enfoque de esta Administración de reforzar las consecuencias para quienes cruzan la frontera ilegalmente, sin restringir el desarrollo de vías legales, seguras y ordenadas para quienes califican. Si bien tomará tiempo implementar completamente estas nuevas medidas, las nuevas herramientas y recursos de aplicación que ofrece esta propuesta fortalecerán aún más nuestra capacidad para hacer cumplir la ley en los meses y años venideros, y comenzaremos a implementarlas tan pronto como se convierta en ley.

Por su lado, la Presidenta del Servicio Jesuita a Refugiados/ Estados Unidos, dijo que como organización presente en la frontera entre México y Estados Unidos “expresamos nuestra profunda preocupación por cómo este proyecto de ley podría complicar aún más la situación en la frontera para quienes buscan seguridad”,

Reconoce la necesidad de asegurar la frontera de nuestro país, pero eso no tiene por qué ser a expensas del acceso al asilo, especialmente cuando el desplazamiento global ha alcanzado niveles récord y se necesitan de manera crítica vías hacia la seguridad”.

El proyecto de ley incluye pasos positivos, como acelerar el proceso de autorización de trabajo para ciertos solicitantes de asilo, reconocer las necesidades de los afganos evacuados, garantizar la representación legal de los niños no acompañados y proporcionar fondos críticos para la asistencia a los refugiados. Pero no va lo suficientemente lejos como para garantizar que las personas que buscan seguridad no tengan que superar obstáculos importantes para presentar su solicitud de asilo.

Pero, al mismo tiempo, se crearía una autoridad de emergencia fronteriza bajo el mando de Alejandro Mayorkas con lo que se podría “expulsar sumariamente y prohibir, total o parcialmente, la entrada a los Estados Unidos” a ciudadanos extranjeros que ingresan entre puertos de entrada, o sea, por el río.

Esa autoridad sería opcional si el promedio acumulativo de siete días de encuentros con la Patrulla Fronteriza está entre 4.000 y 5.000 por día pero seria absolutamente obligatoria si el promedio excede los 5.000. La autoridad obligatoria también entraría en vigor después de un día con más de 8.500 encuentros.

El gobierno federal había hablado de la posibilidad de hasta 18 mil encuentros diarios una vez levantado el titulo 42.

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