Austin, Texas.- El Gobernador de Texas, Greg Abbott propuso a la legislatura la creación de un delito que se pagará con 20 años de prisión para los migrantes que reingresen al estado tras ser expulsados o deportados.
Abbott llamó a una cuarta sesión especial a los legisladores mediante una proclamación y pidió más rigor contra inmigrantes que entren desde México y que permanezcan en el estado a pesar de que se les ha negado su admisión o que hayan sido deportados o expulsados del país y reingresen.
También plantea proporcionar inmunidad a funcionarios públicos, empleados o contratistas relacionados con inmigrantes y pide autorización para expulsar migrantes que hayan ingresado irregularmente al estado.
Por si fuera poco, el republicano busca aún fondos económicos para continuar con la construcción, operación y mantenimiento de la infraestructura del muro estatal fronterizo, incluyendo gastos adicionales de horas extras y costos debido a una mayor aplicación de la ley.
“La Legislatura de Texas avanzó durante el último mes protegiendo a los tejanos de las vacunas forzadas contra el COVID-19 y aumentando las penas por el tráfico de personas”, dijo el Gobernador Abbott. “Sin embargo, queda más trabajo por hacer.
Abbott convocó a los legisladores a la Sesión Especial #4 para que completen su trabajo crítico para capacitar a los padres de Texas para que elijan el mejor camino educativo para sus hijos, al mismo tiempo que proporcionan miles de millones más en fondos para las escuelas públicas de Texas y continúan impulsando las medidas de seguridad en las escuelas.
“Texas arrestará a personas por ingresar ilegalmente a nuestro estado desde una nación extranjera, y autorizará la expulsión de cualquier persona que ingrese ilegalmente a nuestro estado, con penas de hasta 20 años de prisión por negarse a cumplir con la expulsión. Para acabar con los repetidos intentos de ingresar ilegalmente a Texas, el reingreso ilegal será penalizado con hasta 20 años de prisión.