Nuevo Laredo, Tam.- Ni tres horas duraron libres en Nuevo Laredo, Tamaulipas. La madre, abuela y dos menores de edad fueron sustraídos -a la fuerza- del hotel donde se hospedaban, ubicado sobre la calle Reforma.
Ocurrió el 28 de enero. La familia llegó procedente de la ciudad de México a las 2:05 de la tarde; a las 3:20 abordaron un taxi que los llevó hasta el hotel en cuestión. Se hospedaron en la habitación 112.
A las 4:52, el esposo recibió un mensaje que decía “Hay un chavo”, más nada supieron después. Se los tragó la tierra. “A partir de ahí se pierde todo tipo de comunicación”, enfatiza Geovanni Barios de la organización Justicia Tamaulipas.
Barrios detalla que esposo de la mujer, yerno de la abuela y padre de las menores víctimas de la desaparición forzada puso la denuncia ante las autoridades correspondientes, pero hasta el momento nada se sabe.
A Barrios le preocupa que no se hayan activado los protocolos respectivos y que el Comisionado Estatal para la Búsqueda de Desaparecidos no se haya hecho presente en el lugar de los hechos.
“Este no es un caso mediático”, lamentó Barios. De lo contrario, indica, ya habrían sido encontrados y recordó el caso de los funcionarios del gobierno de Coahuila desaparecidos en meses pasados en Nuevo Laredo y encontrados en cuestión de horas. “Ahí se activaron todos los protocolos de búsqueda y demás para poder afortunadamente encontrarlos con vida”. Este tipo de operativos, recomienda, deberían ser aplicados en todos los casos y sobre todo, hacer uso de la denuncia cuando ocurran este tipo de incidentes.